Royal Dutch Shell plc, a través de su subsidiaria Shell Offshore Inc (Shell), anunció que ha comenzado la producción en el sistema de producción flotante Appomattox operado por Shell meses antes de lo programado, abriendo una nueva frontera en la zona de aguas profundas perteneciente a los Estados Unidos en el Golfo de México.
Appomattox, que actualmente tiene una producción esperada de 175,000 barriles de petróleo equivalentes por día (bpe/d), es el primer descubrimiento comercial que entra en producción en la formación Norphlet de aguas profundas del Golfo de México.
«El hecho de que Appomattox haya entrado en operación con seguridad antes de lo programado y muy por debajo del presupuesto es un testimonio de nuestro continuo compromiso de bajar los costos mediante mejoras en la eficiencia durante la ejecución», dijo Andy Brown, director de Exploración y Producción de Royal Dutch Shell.
«Appomattox crea un centro esencial a largo plazo para Shell en la Norphlet mediante el cual podemos conectar varios yacimientos ya descubiertos, así como descubrimientos futuros», añadió.
Appomattox es una historia de eficiencia a través de la innovación. Mediante una planificación optimizada de desarrollo, fabricación y diseños mejores, y una ejecución experta de perforación, Appomattox ha logrado reducciones de costos de más del 40% desde que tomó la decisión final de inversión en 2015.
El inicio de la producción en Appomattox es solo el principio de una mayor maximización del flujo de recursos en la prolífica Norphlet que rodea a Appomattox. La actividad internacional de Shell en aguas profundas tiene un sólido canal de oportunidades de exploración y desarrollo en Brasil, los Estados Unidos, México, Nigeria, Malasia, Mauritania y el oeste del Mar Negro.
La producción en todo el mundo está en vías de alcanzar para 2020 más de 900,000 bpe/d de yacimientos ya descubiertos y establecidos. La empresa sigue siendo uno de los mayores arrendatarios en las aguas profundas de Estados Unidos y también uno de los productores de petróleo y gas natural en aguas profundas más prolíficos del Golfo de México.
Shell diseña y opera sus proyectos de aguas profundas para ser competitivo y, desde 2014, ha reducido sus costos de desarrollo de unidades y sus costos operativos de unidades en un 45%.