Autoridades de seguridad realizaron un cateo en el municipio de Allende, Nuevo León, donde fueron asegurados 1.2 millones de litros de hidrocarburo presuntamente de procedencia ilícita, así como infraestructura utilizada para su almacenamiento y transporte, como parte de la estrategia federal denominada “Operación Frontera Norte”.
El operativo fue resultado de labores de inteligencia y vigilancia en la colonia El Maguey, donde se identificó un predio que operaba sin condiciones mínimas de seguridad. De acuerdo con el comunicado oficial, el lugar representaba un riesgo para la población local al almacenar combustible de forma irregular. La intervención fue autorizada por un juez de control tras la presentación de pruebas recabadas en campo.
Durante el cateo, elementos de la SSPC, en coordinación con la FGR, Sedena, Semar, Guardia Nacional y la Fuerza Civil de Nuevo León, aseguraron 10 pipas, un tractocamión, 10 contenedores móviles, seis tanques cilíndricos, dos bidones de mil litros y un tambo de 200 litros. El inmueble quedó bajo resguardo del Ministerio Público, que continuará con la investigación correspondiente.
Aunque el volumen incautado es significativo, no supera decomisos recientes en otras entidades, como los 3 millones de litros asegurados en Tabasco o los más de 10 millones en Tamaulipas y Baja California, lo que refleja la magnitud del mercado ilícito de combustibles en el país.
Las autoridades reiteraron que estas acciones forman parte de un esfuerzo coordinado para combatir el robo de hidrocarburos, una actividad que genera impactos económicos, sociales y ambientales. “Seguiremos actuando con firmeza para proteger a la población y al Estado de derecho”, señaló el Gabinete de Seguridad en su comunicado.