El avance de la electromovilidad en México se enfrenta a un reto financiero, según datos de la Electro Movilidad Asociación (EMA). Un 51% de los propietarios adquirió su auto eléctrico o híbrido enchufable mediante algún esquema de financiamiento, lo que evidencia la necesidad de diversificar las opciones crediticias para facilitar el acceso a estos vehículos.
El presidente de la EMA, Eugenio Grandio, destacó que entre los 22 socios de la asociación, algunos pertenecen al sector financiero, con Santander como el más grande. Sin embargo, indicó que aún se requiere una mayor sensibilización sobre los casos de negocio en torno a la electromovilidad. “Podemos avanzar, sensibilizar y mostrar los casos de negocio alrededor de la electromovilidad, que son reales”, afirmó.
A nivel nacional, el 60% de las compras de vehículos se realiza con autofinanciamientos, según la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores, lo que señala una brecha en el financiamiento de autos eléctricos. Mientras en otros países la tendencia de adquirir estos vehículos con créditos sigue en aumento, México aún necesita alinear las estrategias económicas y ambientales para fortalecer su adopción.
La EMA llevó a cabo la primera encuesta nacional a usuarios de vehículos eléctricos, con la participación de 1,232 propietarios, lo que permitió identificar factores clave para el crecimiento del sector. Entre los hallazgos más relevantes, se destacó que el 93% de los encuestados está completamente satisfecho con su compra, y el 55% afirmó que no volvería a adquirir un vehículo tradicional.
A pesar del potencial crecimiento, persisten desafíos como la infraestructura de carga y la autonomía de los vehículos, que generan incertidumbre entre los usuarios. La meta de la EMA es que para 2030 el 50% de los nuevos vehículos vendidos en México sean eléctricos, y que en 2035 se alcance el 100%.