El desajuste en la generación eléctrica provocado por la reforma energética de 2013 aún no ha sido resuelto, reconoció Ricardo Octavio Arturo Mota Palomino, director general del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), durante el Foro de Sostenibilidad organizado por la Coparmex.
El funcionario explicó que en varias regiones del país hay zonas con exceso de generación y otras con escasez de energía. Esta disparidad ha dificultado una distribución equilibrada. “Actualmente se ha venido mitigando el problema, pero todavía podemos hablar de que tenemos problemas en las dos penínsulas”, señaló, en referencia a Baja California y Yucatán.
Mota Palomino indicó que el nuevo marco regulatorio, derivado de las reformas constitucionales aprobadas en 2024, busca recuperar la planificación del crecimiento energético. Su objetivo es corregir los desequilibrios entre generación, transmisión y distribución. “Es lo que va a garantizar un desarrollo seguro en el futuro”, afirmó.
Recordó que la reforma de 2013 promovió la participación privada en la generación eléctrica, pero lo hizo de forma inconveniente. Esto provocó un desfase entre la infraestructura disponible y la expansión de proyectos, generando un sistema fragmentado y sin coordinación entre oferta y demanda.
El director de Cenace subrayó que el Estado ha retomado la responsabilidad de garantizar el abasto eléctrico. Bajo el nuevo esquema, el 54% de la generación es estatal y el resto está a cargo de empresas privadas. “Con la reforma del 2013, el abasto quedó prácticamente en manos de una figura denominada mercado, y que realmente no apareció nunca”, concluyó.






