De acuerdo con Edmundo Rodarte, Presidente de la Comisión de Energía de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), la política energética que el actual gobierno federal ha emprendido desde finales del 2018 ha consistido en fortalecer a las dos empresas productivas del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

“Las empresas del Estado son fundamentales para el desarrollo del país. Estamos de acuerdo con esa política. Sin embargo, tenemos diferencias en el cómo se debe fortalecer a Pemex y a la CFE. No se debe fortalecer a las empresas públicas quitando la participación de la iniciativa privada”.

En entrevista para Energía MX con Kim Armengol, aseguró que dejar a un lado la iniciativa privada significa conformar un monopolio por parte de las empresas públicas. Insistió en que la participación privada debe ser un complemento importante para que el país tenga la soberanía energética que está buscando, lo cual no está peleado con el fortalecimiento de las empresas productivas del Estado. 

Sobre la inversión en infraestructura energética en México, señaló que en el tema de electricidad, el país requiere una inversión en generación de 4 mil megawatts, que equivalen a 4 mil millones de dólares por año. Aseguró que la CFE va a participar con el 56% de la generación y la iniciativa privada con otro 44%. En relación al tema de gas natural, aseguró que es un elemento fundamental para el funcionamiento de los sectores industriales.

“Para que el gas natural, que es un elemento básico para que funcione la industria, ya que  sin él no se puede instalar ninguna empresa, llegue al país se requiere inversión en ductos y almacenamiento; sin embargo, en el país no se han dado este tipo de proyectos debido a los cambios en las leyes, que terminan por mermar la confianza de los inversionistas”.

Aseguró que existe un listado de inversión en infraestructura energética que va desde generación, ductos, pozos petroleros, etcétera. Sin embargo, no han avanzado porque los permisos que se requieren para iniciarlos están detenidos en distintas dependencias del gobierno federal.

“Hemos estado en un diálogo, abierto y constante, con la Secretaría de Energía (Sener) a través de otras cámaras empresariales, dándoles ese listado que reporta inversiones por arriba de los 50 mil millones de dólares y con miles de empleos que se pueden generar. Estos proyectos son necesarios para salir de la crisis económica que devino con la pandemia. Existe ese listado de proyectos de inversión que están detenidos por la falta de permisos desde distintas dependencias y se mantienen paralizados desde hace más de un año y medio”.

Sobre los planes para la reactivación económica, Edmundo Rodarte refirió que México tiene una ventaja importante: su cercanía con Estados Unidos, donde se localiza el gas más barato del mundo. Asimismo, señaló que el país requiere de órganos reguladores que sean independientes, con funciones técnicas y apartidistas, que sean árbitros para que las empresas respeten las leyes y reglamentos dentro del sector energético.

“Tenemos una ventaja muy grande: estamos cerca del exportador de gas más barato del mundo. Siempre habrá esa disposición de invertir. Existen proyectos en diversos sectores. Lo único que se pide es certeza jurídica, que no haya cambio en las reglas del juego para que las inversiones en el sector energético, que son a largo plazo porque su recuperación será dentro de 15 a 20 años, tengan certidumbre. Debemos tener órganos reguladores que sean independientes, apartidistas, que sean técnicos y dicten el rumbo correcto de hacia dónde debe avanzar el país para conseguir esa seguridad energética que hemos buscado desde hace muchos años”.

Sobre la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, Rodarte recordó que, con el objetivo de entablar un diálogo con la administración gubernamental e informar sobre los puntos en contra de la iniciativa, la Coparmex participó en el parlamento abierto que se realizó en la Cámara de Diputados.

“Nos posicionamos y señalamos que iba a afectar la competitividad de las empresas. El resultado ha sido favorable porque se han generado más de 150 amparos. Además se provocó una controversia constitucional. Con la Ley de Hidrocarburos está pasando lo mismo. Coparmex y todos los organismos especializados lanzamos la advertencia y le comentamos al gobierno que la Ley sería un error, que dañaría a la Constitución. Sin embargo, ahora le corresponde al Poder Judicial dar una resolución al respecto”.

Durante la etapa de análisis y discusión de la Ley de Hidrocarburos, la COPARMEX advirtió que, una vez que entrara en vigor, esta reforma generaría amparos por parte de las empresas del sector. El organismo señaló que la iniciativa presidencial afecta la libre competencia y concurrencia en el mercado mexicano y representa una clara afectación al Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en el que se privilegia la libertad de mercado.

En mayo pasado, la Coparmex lanzó un comunicado donde asegura que está convencida en que se debe trabajar para que Pemex sea una empresa rentable. Sin embargo, señaló que no está de acuerdo con que para lograrlo se sacrifique la competitividad, otorgándole a la empresa del Estado el control de la venta de hidrocarburos y limitando o eliminando la participación privada en el mercado.

Finalmente, Edmundo Rodarte sostuvo que desde la Coparmex se busca alcanzar la seguridad energética que el país requiere y que la CFE y Pemex se conviertan en empresas fuertes, que generen fuentes de empleo para los mexicanos. Señaló que la Confederación mantiene un diálogo constante con las empresas y organismos del sector energético para alcanzar acuerdos en favor de México.

“Como mexicanos, coincidimos en buscar esa seguridad energética que requiere el país. Queremos que Pemex y CFE se fortalezcan, hay mucho conocimiento técnico en ambas empresas del Estado y además son fuentes de empleo muy importantes. Las diferencias radican en el cómo. Hay muchos caminos que se pueden lograr. En este sentido, requerimos tener una comunicación constante con los organismos del sector energético para llegar a acuerdos y complementar, como iniciativa privada, a las inversiones del gobierno federal. No somos enemigos. Nos complementamos por el bien del país”, concluyó el experto.