La producción nacional de petróleo en México registró una disminución del 4.34% en julio, alcanzando un millón 565 mil barriles diarios. Este descenso se debe principalmente a la reducción en la extracción en los campos de Quesqui y Ku operados por Pemex, según el reporte mensual de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
En comparación con el mes anterior, la producción de líquidos mostró una ligera caída al situarse en 1.832 millones de barriles por día. La producción total de hidrocarburos líquidos también disminuyó, alcanzando un millón 736 mil barriles, con 96 mil barriles provenientes de empresas privadas.
Pemex ha visto su peor desempeño desde 1979, con una producción promedio de un millón 469 mil barriles diarios en julio. A pesar de sumar condensados de campos como Tupilco e Ixachi para incrementar el volumen, la producción de condensados también experimentó una caída reciente.
La CNH informó que 301 pozos de producción de petróleo y gas cesaron operaciones en el último año, reduciendo el número total de pozos activos a 6 mil 706. Además, la producción nacional de gas se redujo a 3 mil 692 millones de pies cúbicos diarios en julio.
Estos datos reflejan un desafío continuo para el sector energético mexicano, con un impacto notable en los campos operados por Pemex.