Desde este martes, México ha anunciado aranceles temporales de entre el 5% y el 50% a la importación de una amplia gama de productos, incluyendo acero, aluminio, textiles, confección, calzado, madera, plástico y sus manufacturas, entre otros. 

Estas medidas tienen como objetivo principal proteger a sectores vulnerables de la industria nacional, los cuales han experimentado una desaceleración en su crecimiento económico debido a conflictos geopolíticos y comerciales. En particular, se busca resguardar la competitividad de sectores como el eléctrico, electrónico, automotriz y de autopartes, que son considerados sensibles para la economía mexicana.

La Secretaría de Economía ha establecido estos aranceles temporales por un periodo de dos años, en un esfuerzo por generar estabilidad y eliminar distorsiones en el comercio. Esta acción también está destinada a fomentar la relocalización de la producción y atraer industrias de alto valor agregado al país.

Se espera que estas medidas proteccionistas contribuyan a preservar miles de empleos en México y a fortalecer la competitividad de la industria nacional en el mercado global.

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