Con el objetivo de cuadriplicar su producción de energía solar para 2025 y ayudar a combatir el cambio climático, Singapur construyó una de las granjas de paneles solares flotantes más grandes del mundo, que abarca un área equivalente a 45 campos de fútbol y produce suficiente electricidad para alimentar las cinco plantas de tratamiento de agua de la isla.
Ubicada en un embalse en el oeste de Singapur, país del sudeste asiático que escasea de tierras, la granja solar fotovoltaica (PV) de 60 megavatios pico ha sido construida por una subsidiaria de propiedad total de Sembcorp Industries (SCIL.SI). El proyecto ayudará a reducir las emisiones de carbono en aproximadamente 32 kilotoneladas al año, comparable a sacar 7,000 automóviles de las carreteras.
A diferencia de los paneles solares de techo convencionales, los flotantes funcionan entre un 5% y un 15% mejor debido al efecto de enfriamiento del agua y no se ven afectados por la sombra de otros edificios, según la presentación del proyecto.
La electricidad generada a partir de los 122 mil paneles solares en el sitio de 45 hectáreas debería convertir a Singapur en uno de los pocos países del mundo en tener un sistema de tratamiento de agua totalmente alimentado por energía sostenible.
Para disipar las preocupaciones sobre el impacto ambiental de tales proyectos, se realizaron evaluaciones antes de instalar los paneles solares para garantizar que no haya un impacto significativo en la vida silvestre o en la calidad del agua.
Los paneles solares están diseñados para durar 25 años y se utilizarán drones para ayudar con el mantenimiento. Actualmente, hay otros cuatro proyectos de paneles solares flotantes en curso en Singapur.