Tras la fuga de hidrocarburos en el ducto Poza Rica–Madero, atribuida a las intensas lluvias en Veracruz, Pemex concluyó la reparación del oleoducto y mantiene un amplio operativo de limpieza y remediación en el río Pantepec. Las acciones buscan contener el derrame y mitigar impactos en comunidades ribereñas.
La Secretaría de Energía (Sener) informó que más de 600 elementos participan en el operativo. El despliegue incluye 200 trabajadores de Pemex, 300 de la Secretaría de Marina, 50 del gobierno estatal y municipal, y 70 técnicos especializados en atención ambiental.
Hasta el momento se han recuperado más de 180 mil litros de hidrocarburo. Pemex instaló 650 metros de barrera oleofílica, que se suman a dos barreras previas. Además, se colocarán ocho barreras contiguas en los brazos del río Tuxpan para evitar la dispersión del material.
Las maniobras de succión y recolección se realizan con equipos de alta capacidad, incluyendo un camión full desplegado en la comunidad de Casa Blanca. Las tareas se coordinan desde el Puesto de Mando Unificado, ubicado en la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) de Tuxpan.
En coordinación con la Secretaría de Marina, la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) y autoridades locales, se instalaron barreras de contención, cordones oleofílicos y equipos de bombeo para controlar el derrame. Pemex indicó que el personal especializado aplica material absorbente y realiza tareas de recolección de residuos.
“Con las maniobras principales ya concluidas, Pemex continúa los trabajos de saneamiento y remediación en las riberas y zonas cercanas”, señaló la empresa. El reinicio de operaciones podría darse en las próximas horas, tras validar condiciones de seguridad industrial y ambiental.






