El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) advirtió que el recorte de 16.7% al presupuesto de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en 2026 obliga a replantear el modelo de financiamiento. Según el organismo, la participación privada será clave para garantizar el suministro eléctrico en México.
El IMCO explicó que la viabilidad del Plan de Desarrollo del Sector Eléctrico (Pladese) depende de un entorno favorable a la inversión. Para lograrlo, se requieren procesos de asignación claros, definir la estrategia para cubrir la capacidad restante y ejecutar en tiempo los proyectos de transmisión eléctrica.
La inversión física en el sector eléctrico sigue a la baja. Al tercer trimestre de 2025 se registraron 26.8 mil millones de pesos, una caída real de 28.1% respecto a 2024. Este retroceso aumenta la presión sobre los mecanismos de financiamiento mixto y refuerza la necesidad de capital privado.
El Pladese, publicado por la Secretaría de Energía (Sener) en el Diario Oficial de la Federación (DOF), sustituye al Prodesen y define la ruta del sistema eléctrico para los próximos 15 años. Sin embargo, el IMCO señaló retos como un crecimiento conservador de la demanda y el rezago en energías limpias, cuya aportación sigue siendo menor frente a las fuentes convencionales.
El instituto también cuestionó los mecanismos de adjudicación de permisos de generación e interconexión. Consideró que los principios actuales carecen de criterios claros de competencia y asignación. Esto puede abrir espacio a la discrecionalidad y generar incertidumbre para la inversión privada.
“Frente al crecimiento constante de la demanda y un menor gasto público, los mecanismos de inversión mixta y la participación privada toman relevancia para garantizar el abastecimiento eléctrico de los próximos años”, puntualizó el IMCO.






