La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha revisado nuevamente a la baja sus previsiones de crecimiento de la demanda mundial de crudo para 2024 y 2025, marcando la cuarta reducción consecutiva en sus estimaciones. Según el informe mensual publicado el martes, la OPEP proyecta que la demanda mundial de petróleo aumentará en 1.82 millones de barriles por día (bpd) en 2024, en comparación con los 1.93 millones de bpd que estimaba el mes pasado.
China ha sido uno de los factores clave para este ajuste. La OPEP recortó su pronóstico de crecimiento de la demanda en ese país a 450,000 bpd, desde los 580,000 bpd proyectados anteriormente. Este cambio responde a una disminución en el consumo de diésel, que en septiembre cayó por séptimo mes consecutivo en términos interanuales, afectado por una desaceleración en la construcción y un aumento en el uso de camiones alimentados por gas natural licuado (GNL).
La organización también ajustó su proyección de crecimiento de la demanda global para 2025, recortándola a 1.54 millones de bpd desde los 1.64 millones estimados previamente. Este ajuste se da en un contexto de precios a la baja, lo que llevó a la OPEP+ —que incluye a aliados como Rusia— a posponer el inicio de un plan para incrementar la producción en diciembre.
Tras la publicación de este informe, el precio del crudo Brent disminuyó, cotizando por debajo de los 73 dólares por barril. Las estimaciones de crecimiento de la demanda para 2024 permanecen divididas entre distintas proyecciones, influenciadas en parte por la transición hacia fuentes de energía menos contaminantes y la desaceleración económica en regiones clave como China.
La OPEP señaló que, pese a las reducciones, sus proyecciones actuales siguen en el extremo superior de las estimaciones de la industria.