El anuncio hecho por parte del Gobierno Federal referente a las medidas de apoyo entorno a la reducción de la carga fiscal de Petróleos Mexicanos (Pemex) ya había sido incorporado en la última acción de calificación y no será suficiente para prevenir el deterioro de la calidad crediticia de la compañía, afirmó Fitch Ratings.
Aunque la combinación de las medidas anunciadas para 2019 suman aproximadamente más de cinco mil millones de dólares y pueden ayudar a que la empresa reporte un Flujo de Fondos Libre (FFL) neutral y no incremente el nivel de deuda; las inversiones en exploración y producción se mantendrán presionadas y no ayudarán a mejorar la producción y la disminución en las reservas.
El apoyo de 5.2 mil millones de dólares incluye 1.25 mil millones de inyección de capital, 1.75 mil millones de amortización anticipada de los bonos de gobierno recibidos para apoyo en obligaciones por pensiones en 2017 y 0.75 mil millones de reducción en las transferencias al gobierno.
Pemex y el gobierno Mexicano esperan generar 1.6 mil millones de dólares en ahorros derivados de las medidas tomadas para reducir en el robo de combustible. Las medidas de apoyo anunciadas son menores que los 12 mil millones de dólares a 17 mil millones de requerimientos de efectivo anuales adicionales que Fitch estima que Pemex necesita para detener la caída en la producción y en el nivel de reservas.
El anuncio de la reducción de la carga scal es improbable que mejore el perfil crediticio individual en escala internacional de Pemex de ‘CCC’ y probablemente no cambiará la evaluación como «moderado» sobre el historial de soporte.
Como resultado, Fitch espera mantener una diferencia en la calificación internacional menor en dos niveles a la del soberano, y que la calificación de Pemex se mueva en línea con la calificación del soberano. Asimismo, un deterioro continúo en el perfil crediticio individual de Pemex también podría ser negativo para la calificación de la compañía, independientemente de una acción de calificación del soberano.
Fitch estima que Pemex necesitará un flujo de efectivo de entre 12 mil millones de dólares a 17 mil millones por año para tener un programa de inversión de capital en exploración y producción que sea suficiente para reponer 100% de las reservas y estabilizar la producción, y todavía tener un nivel de flujo de efectivo neutro sin endeudamiento adicional.
Para reponer 100% de las reservas en una producción anual de aproximadamente 940 millones de barriles de petróleo equivalente por año, Pemex necesitará invertir entre 13 mil millones de dólares a 18 mil millones anuales en capex de exploración y producción, que es un incremento relevante desde el capex estimado de menos de 5 mil millones de dólares durante 2018 y el proyectado para 2019.
Esto representa una subinversión de 8 mil millones de dólares a 13 mil millones. Durante 2018, la compañía estimó tener un FFL negativo de aproximadamente 3.5 mil millones de dólares, el cual sumado al nivel estimado de subinversión resulta en 12 mil millones de dólares a 17 mil millones de déficit de financiamiento. Las medidas anunciadas el día de hoy no cambiarán de manera significativa el nivel de subinversión hacia el negocio.