jueves, enero 30, 2025
25 C
Mexico City
jueves, enero 30, 2025
InicioEspecialesColumnasTránsito de gas ruso hacia Europa por Ucrania: fin de una era

Tránsito de gas ruso hacia Europa por Ucrania: fin de una era

Por: Juan Arellanes Arellanes Académico de la Facultad de Estudios Globales de la Universidad An��huac México.

Posee experiencia en docencia, investigación y consultoría en temas medioambientales, urbanos y energéticos. Su área de especialidad académica es la seguridad energética y la geopolítica del petróleo. Es coordinador del Centro Interdisciplinario Anáhuac de Energía y Sostenibilidad.


El suministro de gas ruso a Europa a través de Ucrania, operativo por más de medio siglo, terminó el 1 de enero de 2025. En el contexto de la guerra entre Rusia y Ucrania, el presidente Volodímir Zelenski se negó a renovar el contrato de tránsito. Aunque el gas ruso seguirá fluyendo por el Mar Negro y Turquía mediante el gasoducto TurkStream, este hecho marca el fin del dominio ruso en el mercado energético europeo, un cambio que trasciende la guerra y debe analizarse en un contexto más amplio.

Tras el embargo petrolero árabe de 1973, Europa Occidental buscó diversificar sus fuentes de energía. La Ostpolitik alemana, desde 1969, facilitó acuerdos que impulsaron la construcción de gasoductos entre Siberia y Europa. En 1970, la URSS exportaba 3,400 millones de metros cúbicos (m³) de gas a algunos países del bloque, cifra que creció a 57,600 millones de m³ en 1980, abasteciendo a 12 naciones europeas.

Esta relación energética generó preocupación en Estados Unidos. Durante la presidencia de Ronald Reagan, se intentó bloquear el gasoducto transiberiano mediante un embargo. Sin embargo, países como Francia, Alemania y el Reino Unido, bajo Margaret Thatcher, mantuvieron sus compromisos con la URSS, demostrando la importancia estratégica del gas ruso para Europa desde entonces. Tras el fin de la Guerra Fría, Rusia llegó a suministrar más del 50% del gas importado por la Unión Europea. Aunque su participación disminuyó a menos del 30% entre 1995 y 2010, volvió a crecer, alcanzando más del 40% del consumo europeo en 2019.

Desde la llegada de Vladimir Putin al poder, las exportaciones de energía rusa se convirtieron en un instrumento geopolítico clave. Gazprom, controlada en más del 50% por el estado ruso, monopoliza las exportaciones de gas desde 2006, gestionando 160,000 km de gasoductos hacia Europa. Con más de 460,000 empleados, Gazprom generó ingresos netos superiores a 165,000 millones de dólares en 2015. Hasta 2021, producía más de 520,000 millones de m³ de gas anuales, representando el 75% de la producción rusa y casi el 15% de la mundial. La dependencia europea del gas ruso y el uso de Gazprom como herramienta de poder ruso llevaron a la UE a buscar alternativas para diversificar sus fuentes de energía desde hace al menos dos décadas.

En 2006, la Comisión Europea lanzó la iniciativa The Southern Gas Corridor para acceder a los recursos gaseros del Mar Caspio y Medio Oriente a través de Azerbaiyán. Las distintas fases del proyecto fueron completadas entre 2008 y 2020. En respuesta, Rusia propuso la construcción de South Stream (similar a Nord Stream, pero para abastecer al sur de Europa), que fue reemplazado por Turk Stream, que comenzó a operar en 2020. La entrada en operación de Nord Stream en 2011 fortaleció el vínculo energético entre Rusia y Alemania. Los tres proyectos (The Southern Gas Corridor, Nord Stream y Turk Stream) surgieron debido a la falta de confianza en Ucrania como país de tránsito del gas ruso hacia Europa.

Desde 2005, Gazprom acusó a Ukrtransgaz, la empresa ucraniana encargada de gestionar los gasoductos, de desviar gas destinado a Europa para consumo ucraniano. En enero de 2006 y 2009, se produjeron crisis de suministro hacia Europa debido al conflicto entre Rusia y Ucrania, eventos que fueron exageradamente denominados “guerras del gas”. En ese entonces, ya existían tensiones entre Rusia y Ucrania por el arrendamiento de la base militar de Sebastopol en Crimea y el acercamiento de Ucrania a Occidente.

La crisis se intensificó en 2008 cuando EEUU invitó a Georgia y Ucrania a unirse a la OTAN. En 2014, la revuelta del Maidán, la destitución de Viktor Yanukovich y la anexión de Crimea por Rusia desencadenaron la guerra civil en el Donbás. Tras años de conflicto, Rusia intervino a favor de las repúblicas separatistas rusófilas (Donetsk y Lugansk), lo que llevó a la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022. La situación se volvió aún más dramática a partir de septiembre de 2023 cuando el gasoducto Nord Stream fue saboteado. La relación energética entre Rusia y Alemania había sido, literalmente, rota.

Ante esta situación, la Unión Europea intentó reemplazar gran parte del gas ruso con gas natural proveniente de Noruega y gas natural licuado (LNG) de Qatar y EEUU. Aunque inicialmente parecía una estrategia viable, a casi tres años del inicio de la guerra, ya es posible evaluar las consecuencias energéticas y las tendencias futuras.

En primer lugar, la capacidad global de exportación de LNG es limitada en comparación con las exportaciones por gasoducto. El LNG requiere plantas de licuefacción, terminales de exportación y recepción, y buques cisterna criogénicos para mantener el gas en estado líquido durante el transporte. Además, se deben considerar los costos logísticos, de transporte por buque y de regasificación en los puertos de destino. En resumen, el LNG resulta más costoso que el gas natural por gasoducto.

En segundo lugar, las exportaciones de LNG de EEUU han crecido aceleradamente desde 2016, alcanzando los 94,000 millones de m³ en 2021. Aunque las exportaciones continuaron creciendo entre 2022 y 2024, el aumento fue moderado debido a las limitaciones en la capacidad exportadora de EEUU y la inacabada construcción de terminales de regasificación en Europa. Europa “arrebató” el gas LNG que antes se enviaba a India, Pakistán y Bangladesh, países que enfrentaron graves crisis energéticas, incluidos apagones. Además de ser más costoso, el LNG de EEUU y Qatar no puede cubrir los volúmenes que antes suministraba Rusia, lo que ha llevado a una notable reducción de las importaciones europeas.

Una tercera consecuencia es la caída sustancial de las exportaciones rusas de gas. Tras perder el mercado europeo, Rusia está buscando nuevos destinos en China, aunque esto requiere la construcción de gasoductos y terminales de LNG. También está apuntando a los mercados del sur de Asia que antes abastecían EEUU y Qatar. Sin embargo, Rusia tardará en reemplazar el mercado europeo, y China no está dispuesta a pagar precios elevados por el gas ruso, lo que dificulta las negociaciones.

Quien se lleva las pérdidas más grandes es Ucrania, que no sólo ha quedado devastada por la guerra, sino que parece que será “abandonada” por la nueva administración de Donald Trump y, para colmo, se ha quedado sin los ingresos por tránsito de gas. Pero también Europa ha sufrido un daño colosal. El gas ruso era energía barata esencial para la competitividad industrial europea, especialmente de Alemania.

Tras una crisis de precios a finales de 2022, los precios del gas se han estabilizado en un nivel más alto que antes de la guerra. El consumo de gas de los comercios y los hogares no se ha resentido. Casi toda la disminución del consumo de gas ha ocurrido en la industria, especialmente en los sectores más intensivos en energía: industria química, metalúrgica, del vidrio, del plástico, de fertilizantes y automotriz. Con la crisis de precios del gas de 2022, la producción de fertilizantes nitrogenados en Europa cayó un 70%. Europa tuvo que importar grandes cantidades de fertilizantes… de Rusia.


Te puede interesar

Renovables y gas natural: la fórmula de la transición energética en México

Innovación y sostenibilidad, la estrategia de Dow en la movilidad del futuro

Desafíos e innovaciones en la gestión de Centros de Datos en la era de la Hiperconectividad

Cantarell Corp cierra ronda Serie B con 35 mdd y una valuación de 521 md

Negocios Industriales

Relacionados

Coparmex reconoce avances en leyes secundarias del sector energético y pide certeza jurídica

La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) reconoció los avances en la presentación inicial del gobierno federal sobre las leyes secundarias del sector...

Saudi Arabia presenta plan para atraer centros de datos globales

Durante el Foro Económico Mundial en Davos, el Ministro de Finanzas de Arabia Saudita, Mohammed Al-Jadaan, presentó un plan estratégico para atraer centros de...

Incertidumbre sobre impacto financiero de leyes secundarias en Pemex y CFE: Expertos

El paquete de leyes secundarias en materia energética presentado por el Gobierno federal permitirá la inversión privada en electricidad y petróleo, pero expertos advierten...