La presidenta Claudia Sheinbaum presentó este lunes el proyecto Olinia, la primera armadora mexicana de minivehículos eléctricos, cuyo objetivo es fabricar tres modelos de vehículos para 2030, con precios que oscilarán entre los 90,000 pesos y 150,000 pesos.
El proyecto Olinia se desarrollará con una combinación de capital público y privado y se enfocará en tres tipos de vehículos: uno para movilidad personal, otro para “movilidad de barrio” y uno más para entregas de última milla. Roberto Capuano, encargado del proyecto, indicó que se espera que el primer modelo esté disponible para el Mundial de 2026 en el Estadio Azteca.
Con un presupuesto inicial de 25 millones de pesos para el desarrollo, el Gobierno ha conformado un equipo de investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y el Tecnológico Nacional de México, que trabajarán en el diseño de los modelos en 2024.
La iniciativa responde a la creciente demanda de soluciones de movilidad urbana, ya que el 70% de la población mexicana vive en zonas urbanas, y el 80% de esta población necesita desplazarse menos de 30 kilómetros al día. El proyecto busca impulsar la industria automotriz mexicana, que representa casi el 4% del PIB nacional.
Olinia se enmarca dentro de la tendencia global de minivehículos eléctricos, que ha mostrado un auge en mercados como China e India, donde en 2023 se vendieron más de 1.3 millones de unidades. En México, la iniciativa tiene como objetivo potenciar la movilidad eléctrica como una solución para la transición energética y la reducción de emisiones de gases contaminantes.
Rosaura Ruiz Gutiérrez, secretaria de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, destacó que el proyecto no solo se limita a la fabricación de vehículos, sino que también busca generar un cambio en la industria mexicana a través de la transferencia tecnológica y la creación de nuevas empresas mediante asociaciones público-privadas.