Por Paola Martínez
Directora de Comunicación y RSC de Iberdrola México
Recientemente tuve la oportunidad de acudir a un panel sobre inclusión del colectivo LGBT+ en entornos laborales y escuché cómo varios testimonios utilizaban reiteradamente una misma palabra: miedo.
Vivir con miedo y trabajar con miedo. Con miedo a ser criticados, a ser discriminados, a no optar a las mismas oportunidades laborales o, simple y llanamente, a sentirse rechazados y desplazados en su puesto de trabajo.
Crear ambientes laborales seguros, donde cada miembro de la plantilla se sienta cómodo y pueda trabajar sin miedo es uno de los retos más importantes a los que nos enfrentamos en las empresas.
¿Por qué hablar de esto? Primero, porque en México hay 5.1 millones de habitantes que se autoidentifican como parte del colectivo LGBT+, de acuerdo con el INEGI.
Segundo, porque en México el 28.1 % de esas personas han recibido un trato desigual respecto a los beneficios, prestaciones laborales o ascensos en su trabajo, además de ser objeto de burlas o comentarios ofensivos.
Estas cifras nos demuestran que aún falta un largo camino por recorrer para erradicar el miedo que aqueja a las minorías, como pueden ser las personas que forman parte del colectivo LGBT+, en cuanto a la inclusión laboral. Como líderes, tenemos la responsabilidad de crear espacios de trabajo donde nuestro equipo se sienta bienvenido, valorado y respetado.
Es por ello que en Iberdrola México trabajamos para crear entornos seguros, libres de violencia y discriminación donde todo el personal pueda aportar su talento en total libertad. Porque los equipos diversos e inclusivos son esenciales para el éxito de nuestra compañía.
Al lograr una apertura a la diversidad podremos encontrar diferentes formas de pensar y experiencias que nos encaminarán a mejorar la toma de decisiones y a tener una visión más innovadora, lo que es clave para nuestro negocio.
Iberdrola trabaja desde hace varios años en pro de la diversidad y la inclusión. En 2019 se creó el Comité Global de Diversidad e Inclusión y desde 2022 contamos con una función global de Diversidad e Inclusión.
En México hemos impulsado múltiples iniciativas. En 2018 llevamos a cabo el primer foro Mujeres con Energía, con el objetivo de fortalecer el liderazgo de las mujeres en la organización. También lanzamos varios programas sociales como Impulso STEM —que tiene el propósito de reducir la brecha de género en el estudio de carreras de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas— o Brigadas Urológicas —que brinda atención médica a habitantes de Oaxaca— especialmente a mujeres con problemas urológicos complejos.
El año pasado celebramos nuestra primera Semana de la Diversidad, Equidad e Inclusión y firmamos un decálogo con varias medidas, como la elaboración de una primera encuesta de Diversidad e Inclusión para identificar a las minorías, la creación de un Comité en Diversidad e Inclusión conformado por distintas áreas y un departamento dedicado a la materia, que entró en funcionamiento a comienzos de 2023.
Además, como parte de nuestra responsabilidad social corporativa, ampliamos un 15 % del presupuesto en este rubro y firmamos alianzas con asociaciones civiles y redes que promueven los derechos del colectivo LGBT+, la equidad de género y la visibilidad de personas con discapacidad.
Conscientes de que este es sólo el comienzo para lograr la verdadera diversidad e inclusión en el sector energético, tradicionalmente masculinizado, este julio realizamos la segunda Semana de la Diversidad, Equidad e Inclusión con una serie de talleres y conferencias.
Este año tenemos la meta de crear nuestro primer grupo de afinidad para la comunidad LGBT+. Además, publicaremos el Protocolo de Atención y Prevención a Casos de Violencia y Discriminación, con el que buscamos tener un marco de actuación para garantizar los derechos de todo el personal a un espacio seguro y libre de violencia.
Sabemos que vamos por el camino correcto, pero todavía no estamos donde queremos estar y para eso trabajamos arduamente por una inclusión laboral con las mismas oportunidades para todas las personas.
Para que la palabra miedo se erradique, para siempre, de cualquier entorno laboral.
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