Ante el objetivo de lograr la autosuficiencia en materia de combustibles y dejar de importar gasolinas tan pronto como en 2023, esta independencia implica poder mantener estables los precios de la gasolina y el diésel para los mexicanos si se presenta una crisis energética como la actual.

Actualmente las reservas petroleras se han repuesto al 100 por ciento y se han incrementado en 400 millones de barriles por arriba de las recibidas. En materia de refinación, el proceso de crudo pasó de 519 mil barriles en noviembre de 2018, a un millón 98 mil barriles en lo que va de 2022, datos que incluyen a la refinería de Deer Park, de acuerdo con el director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Ramírez Oropeza.

Para ello, se han realizado inversiones sin precedentes para aumentar la capacidad para refinar de Pemex, ampliando el Sistema Nacional de Refinación de seis refinerías a ocho, con la adquisición de Deer Park y la construcción de Dos Bocas.

Hay otros proyectos complementarios:

En cuanto al procesamiento del coque, en 2023, Pemex concluirá la construcción de una unidad coquizadora en la refinería de Tula, Hidalgo. En esta nueva unidad se procesará el combustóleo producido por las refinerías de Tula y Salamanca, que representa alrededor de 140 mil barriles diarios, y se convertirán en 42 mil barriles de gasolina, 78 mil de diésel y 20 mil de turbosina. Asimismo, se ha adjudicado a ICA un contrato para construir una coquizadora en la refinería de Salina Cruz, Oaxaca.

Por lo que respecta al procesamiento de condensados, en el Centro Procesador de Gas de Burgos (CPG), Tamaulipas, se cuenta con una planta fraccionadora con capacidad de procesar alrededor de 20 mil barriles diarios de condensados, que principalmente producirá precursores de gasolina y diésel.

Asimismo, Pemex adjudicó el contrato para la construcción de la unidad de proceso CCR (ciclo de reformado catalítico), ubicada en el complejo petroquímico de la Cangrejera. La unidad tiene una capacidad de procesamiento de 27 mil 500 barriles por día de nafta.

En cuanto a producción de gas natural, se retomará el proyecto del yacimiento Lakach, en aguas profundas frente a las costas de Veracruz, para explotar una reserva estimada en 900 millones de pies cúbicos de gas natural, esperándose pueda producir en julio de 2023.

Además de estas acciones, se han invertido más de 32 mil millones de pesos solo en la rehabilitación de las seis refinerías para que produzcan arriba del 70 y 80% de su capacidad. Al concluir su modernización alcanzaría cada una de ellas: 200 mil barriles diarios la de Salamanca; Minatitlán, 200 mil bd; Madero, 165 mil bd; Cadereyta, 230 mil bd; Salina Cruz y Tula, 290 mil bd cada una.

Toda esta infraestructura de refinación habrá de operar de manera coordinada y aprovechando sus capacidades de manera eficiente para lograr el objetivo de la autosuficiencia en combustibles, primordial para robustecer a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).