El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aprobó una licencia para exportar gas natural licuado (GNL) al proyecto Commonwealth LNG en Luisiana, marcando la primera autorización de exportaciones de GNL desde que la administración de Joe Biden suspendió dichas licencias a principios de 2024. Esta medida se enmarca dentro del esfuerzo para reducir la dependencia europea del gas ruso y fortalecer la economía estadounidense. La planta de Commonwealth LNG, con una capacidad de 9.5 millones de toneladas métricas de GNL por año, tiene como objetivo exportar a mercados en Asia y Europa, comenzando la producción a inicios de 2029.
Además, Trump firmó una orden ejecutiva para la creación de un nuevo consejo de energía dirigido por el secretario de Interior, Doug Burgum, cuyo objetivo será aumentar la producción de petróleo y gas en el país. Este consejo se encargará de promover la perforación en más de 600 millones de acres de aguas federales en alta mar que habían sido retirados por la administración Biden.
A pesar de la reactivación del sector energético, los ecologistas expresan su preocupación por el impacto potencial en las emisiones de carbono, mientras que las industrias locales temen un posible aumento en los precios del gas a nivel nacional.
Se espera que las exportaciones de GNL de EU se dupliquen antes de finalizar la década.