El gobernador de Nuevo León, Samuel García, advirtió que buscará sanciones para la petrolera estatal, Petróleos Mexicanos (Pemex), luego de un aumento dramático en las emisiones visibles de su refinería Cadereyta durante la mañana del domingo.

Por medio de diferentes videos publicados en redes sociales, fue posible constatar la emanación de un humo espeso, amarillo y negro que salía de las antorchas, destinado a quemar solo pequeños volúmenes del exceso de gas natural.

“Vamos a imponer duras sanciones por este hecho”, declaró el mandatario, por medio de un video y stories en sus redes sociales oficiales.

“Le he pedido al secretario de Medio Ambiente que sea contundente y aplique la ley para que, pase lo que pase, ya no suceda este tipo de hechos que contaminan nuestro aire. Tenemos derecho a un aire limpio en Nuevo León”.

Por su parte, Pemex declaró que las operaciones fueron «detenidas de manera segura» en una de las plantas en la refinería de Cadereyta; en el comunicado, la empresa agregó que no había riesgo para la población y que las emisiones estaban bajo control.

Sin embargo, la Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León compartió en un comunicado la detección repetidamente de emisiones «intensificadas» de la refinería, particularmente durante la noche, y que la refinería era responsable del 90% de las emisiones de dióxido de azufre en el área metropolitana de la ciudad de Monterrey, el capital del estado.

Agregó que la ley ambiental estatal otorga a la institución el derecho, si fuera necesario, de detener las operaciones en la refinería.

Actualmente, Pemex se encuentra bajo una intensa presión internacional, incluso de Estados Unidos y sus propios inversionistas en bonos, para limpiar sus operaciones después de dos grandes fugas de metano el año pasado y una excesiva quema de gas en sus campos.