Lhyfe, empresa global en la producción de hidrógeno verde y renovable, estableció una colaboración estratégica con Deutsche Bahn para avanzar en la adopción de trenes ecológicos impulsados por hidrógeno. La empresa ha inaugurado una planta de electrólisis en Tubinga, destinada a suministrar hidrógeno verde a Deutsche Bahn.
Esta planta, ubicada en el centro de innovación de DB Energie, cuenta con una capacidad de producción anual de hasta 30 toneladas, con una capacidad de electrólisis instalada de 1 MW. La electricidad utilizada proviene exclusivamente de la cartera de electricidad verde de Deutsche Bahn, asegurando un proceso de producción sostenible desde su origen.
En Tubinga, DB Energie está explorando nuevas tecnologías para garantizar un suministro energético sostenible a las vías ferroviarias a través del proyecto «H2goesRail». Este año, se planea poner en funcionamiento un tren de hidrógeno neutral en carbono en una ruta de prueba entre Tubinga, Horb y Pforzheim, marcando un hito significativo en la transición hacia la movilidad sostenible en Baden-Württemberg.
Luc Graré, responsable de Europa Central y Oriental en Lhyfe, destacó que este proyecto no solo demuestra la viabilidad económica de las soluciones de hidrógeno en el transporte, sino que también subraya la importancia de tecnologías innovadoras para descarbonizar el sector.
Los trenes impulsados por hidrógeno representan una alternativa limpia y eficiente frente a los trenes diésel tradicionales, al emitir prácticamente cero CO2 durante su operación.
Además, Lhyfe está comprometida con el desarrollo de soluciones personalizadas en toda Europa, expandiendo su red de producción y distribución de hidrógeno verde. La planta en Tubinga marca su primera incursión en Alemania, con planes para una nueva instalación en Schwäbisch Gmünd que producirá hasta 4 toneladas de hidrógeno verde al día.
Con estos avances, Lhyfe aspira a consolidarse como un actor clave en la movilidad y la industria, preparada para satisfacer la demanda creciente de hidrógeno verde en mercados europeos clave como Francia y Alemania para el año 2025.
Este proyecto no solo representa un avance significativo en la implementación de tecnologías de hidrógeno verde, sino que también establece un precedente para la integración de soluciones ecológicas en infraestructuras críticas como las redes ferroviarias, promoviendo un futuro más limpio y sostenible para el transporte a nivel regional y más allá.