Iberdrola está preparando su regreso al mercado eléctrico mexicano gracias a la reciente aprobación de nuevas reglas para el uso de baterías de almacenamiento de energía en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN). Esta medida busca evitar interrupciones en el suministro y mejorar la integración de energías renovables. La Comisión Reguladora de Energía (CRE) aprobó el 30 de septiembre de 2021 el acuerdo A/113/2024, que establece disposiciones administrativas para integrar estos sistemas de almacenamiento.
A principios de este año, Iberdrola finalizó la venta de 13 plantas de energía eléctrica en México, representando el 55% de su negocio en el país. Esta acción puso fin a un litigio con la administración de Andrés Manuel López Obrador, quien había cuestionado los contratos de la empresa española con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Las nuevas regulaciones permiten que las baterías almacenen energía generada durante períodos de alta producción para su uso en momentos de mayor demanda. Esto no solo contribuye a la estabilidad del suministro eléctrico, sino que también favorece la transición energética al reducir la dependencia de fuentes fósiles.
Iberdrola ha visto en esta regulación una oportunidad de negocio y prevé invertir 2 mil 900 millones de dólares en la construcción de 17 plantas de energía renovable hacia 2030. Además, la firma espera que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) emita la norma secundaria necesaria para implementar estas nuevas disposiciones.