Dentro de tres semanas, Shell y Chevron perforarán su primer pozo en México desde la Reforma Energética. Se trata del pozo Chibu-1EXP, que se localiza a profundidades de más de 2,800 metros, lo que lo convierte en uno de los más profundos del país.
El octubre pasado, Chevron adquirió el 40 por ciento de la participación de Shell en los bloques 20, 21 y 23 de aguas profundas del Golfo de México, mismos que la segunda ganara en enero de 2018, durante la ronda 2.4, que fue organizada bajo la administración de Enrique Peña Nieto.
La puesta en marcha de la actividad se percibe como adelantada a lo previsto, dado que el contrato se firmó apenas en julio de 2018. Las noticias referentes a esto se podrán conocer en tres meses y cabe mencionar que, una vez concluido este trabajo, se procederá a la perforación del segundo compromiso en bloque.
Según palabras del vocero de Chevron, Ray Fohr, el acuerdo ha significado el fortalecimiento de la cartera en upstream del portafolio de la compañía en México y el avance de su estrategia de crecimiento en la exploración de aguas profundas.