Científicos de Estados Unidos trabajan en nuevas técnicas de fractura con dióxido de carbono y gas natural en lugar del agua para extraer hidrocarburos de yacimientos no convencionales.
Shawn Bennett, subsecretario adjunto para Petróleo y Gas Natural en el Departamento de Energía del gobierno estadounidense, presentó la fase experimental de esta variante de la fractura como medio para liberar crudo y gas atrapados en una roca durante su discurso en la apertura de la exposición Oil & Gas Patagonia.
El funcionario detalló la marcha de algunos proyectos científicos con los que su país busca mejorar la eficiencia en los yacimientos y reducir los riesgos durante el uso de la fractura hidráulica en desarrollos no convencionales.
Abundó que para esto, el gobierno del presidente Donald Trump desplegó una red de 17 laboratorios públicos que trabajan junto con petroleras privadas y universidades. En ese ámbito, los científicos experimentan las nuevas técnicas para pozos no convencionales directamente sobre los yacimientos en producción.
Bennett dijo que, entre los objetos de investigación, buscan establecer “cómo se comporta el shale en la escala de nanoporos”. Asimismo, explicó que los científicos están experimentando con fluidos a distintos niveles de presión, para extraer el hidrocarburo en mayor cantidad y con menor gasto de recursos.