Los precios del petróleo alcanzaron el miércoles 24 de febrero máximos en más de un año, impulsados por una caída de la producción en Estados Unidos tras una ola de frío polar que afectó las principales regiones petroleras del país.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en abril ganó 2.55% a 67.04 dólares en Londres, y el barril de WTI para entrega en abril ganó 2.51% a 63.22 dólares. A este nivel los dos contratos de referencia terminaron en máximos desde el 7 y el 6 de enero de 2020 respectivamente, antes del inicio de la pandemia en Estados Unidos. Por su parte, las reservas comerciales de petróleo en Estados Unidos aumentaron para sorpresa de los analistas, que esperaban una baja sustancial.
Según un informe de la Agencia estadounidense de Información sobre Energía (EIA), al 19 de febrero las reservas comerciales de crudo en el país crecieron 1.3 millones de barriles (mb) a 463 mb (+0,3%), cuando los analistas esperaban una caída importante, de 6.5 mb. Con los apagones masivos que paralizaron fábricas, la demanda sobre cuatro semanas cayó casi 4% a 19.5 mb diarios (mbd), lo cual explica que se haya recurrido menos a las reservas. Estas reservas permanecen estables sobre la media de los últimos cinco años.