El coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira Valdez, sostuvo que no está de acuerdo en que se fije la aprobación de la reforma eléctrica que plantea el Ejecutivo para abril de 2022, porque estarán en el debate electoral, sino hasta después de agosto; “tienen que pasar las elecciones y tiene que haber un suficiente tiempo para un debate”.
“Nosotros vamos hasta agosto, para ser claro sobre el tema eléctrico. Nos interesa que la Cámara debata, que no se utilice electoralmente, por eso estamos diciendo que abril es para utilizarlo electoralmente”, sostuvo en declaraciones a la prensa.
Asimismo, insistió en la necesidad de realizar un parlamento con debate profundo y serio, en el que participen todos los actores.
La reforma eléctrica debe ser discutida después de las elecciones del próximo año, porque hacerlo antes, en marzo o abril, no sería sano ni serio, lo vuelve un tema electoral, cuando debe ser técnico y profundo.
Insistió que ésta y cualquier otra reforma constitucional de gran calado debe tener tiempo suficiente para ser debatida.
La postura del PRI, destacó, es que cualquier propuesta de modificación a la Constitución que sea de gran calado, no se haga en medio de un proceso electoral, “no es sano para el país, los partidos políticos, ni para una Cámara que debe discutir con profundidad”.
El tema eléctrico, dijo, es muy serio y no puede ser debatido en “fast track”, en ningún sentido, positivo o negativo, porque hacerlo de ese modo lo vuelve sospechoso.
Moreira Valdez aseveró que los parlamentos que ha realizado Morena no han abonado en nada, por lo que sugirió llevarlos a la Junta de Coordinación Política. Enfatizó que el parlamento para la Reforma Eléctrica que ha propuesto el PRI, debe tener un formato especial, para que asistan los verdaderos actores y haya un debate serio, no de cuatro o cinco horas, como el