China ha iniciado una nueva campaña de perforación ultra profunda en el desierto de Taklimakan, en la región de Xinjiang, con el objetivo de extraer petróleo y gas de yacimientos ubicados a 8,000 metros de profundidad. El pozo Manshen 72-H6, en el condado de Xayar, alcanzará una profundidad de 8,735 metros.
En los últimos años, el país ha intensificado sus proyectos de perforación en tierra y mar con el fin de reducir su dependencia de las importaciones de hidrocarburos. Empresas como Sinopec, CNOOC y CNPC lideran iniciativas estratégicas, incluyendo la perforación del pozo Shendi Take 1 y el yacimiento Deep Sea #1.
China también desarrolla una plataforma de perforación inteligente con capacidad para alcanzar los 15,000 metros de profundidad, en un megaproyecto dirigido por la Academia China de Ciencias Geológicas. En 2023, un pozo en la cuenca de Tarim superó los 10,000 metros tras 279 días de perforación, marcando un récord en el país.