Chevron y Exxon Mobil están negociando acuerdos para proporcionar energía a los centros de datos que alimentan la inteligencia artificial (IA), utilizando gas natural y tecnologías de captura de carbono. Estas iniciativas se dan en el contexto de una creciente demanda de electricidad impulsada por el auge de la IA generativa, que se espera aumente significativamente en los próximos años.
Chevron lleva más de un año en conversaciones para ofrecer energía con gas natural y tecnologías de captura de carbono, según Jeff Gustavson, presidente de Chevron New Energies. Por su parte, Exxon Mobil también está trabajando en proyectos para suministrar electricidad con bajas emisiones de carbono, combinando la captura de carbono con sus plantas de gas natural.
Ambas empresas, tradicionalmente centradas en la producción de energía para sus propias operaciones, ahora buscan posicionarse en el mercado energético global, aprovechando su experiencia en gas natural y captura de carbono para satisfacer las necesidades energéticas de la industria tecnológica, que experimenta una demanda sin precedentes.
Este movimiento ocurre en un contexto de inversión en nuevas infraestructuras de gas natural y un retraso en el cierre de plantas de combustibles fósiles, a medida que la industria eléctrica estadounidense se adapta a las nuevas exigencias.