A finales de 2007, Ramón Fiestas asumió el cargo de director para América Latina e hizo un diagnóstico para identificar los mercados que representaban potenciales ventajas para desarrollar la energía generada por el viento. En ese sentido, recordó que cuando asumió dicha responsabilidad había 200 megavatios eólicos funcionando; en aquel entonces Argentina tenía 10, México 35 y Brasil entre 170 y 180, pero los resultados no eran los esperados debido a la falta de sincronización entre la planificación energética del gobierno y los procesos administrativos de licenciamientos de los proyectos, lo que resultó un reto a vencer.
En entrevista para Global Energy, dijo que ahora, América Latina tiene instalados mas de 22,000 MW, con Brasil y México, en ese orden, como los mayores mercados. Por ello, destacó que Argentina, Brasil, México y Uruguay “están bendecidos con recursos naturales abundantes y especialmente con viento”.
El ingeniero comentó que en los próximos años la tendencia en energía eólica irá al alza y se consolidará para instalar cerca de 4 mil megavatios anuales, de los cuales 2 mil se instalarán en Brasil y el resto en diferentes mercados en función del grado de solidez de las políticas publicas que se han implantado.
Dijo que México espera alcanzar su objetivo de generar el 35% de su capacidad de energía a través de fuentes renovables antes de 2024, y aseguró que más de la mitad será gracias a la energía eólica. Además, mostró su beneplácito porque en México se hicieran esfuerzos para que diversos sectores comprendan las ventajas de la energía eólica desde el punto de vista tecnológico, económico, ambiental y sociológico.
En este aspecto, un punto de partida fue la Reforma Energética, con la cual México tomó la decisión de modernizar sus equipamientos energéticos con el objeto de reducir emisiones contaminantes de manera sustentable y eficiente. Esta comprensión llevó al país a doblar la potencia eólica instaurada, ya que se instaló casi 1 GW de nueva capacidad para tener una capacidad total de 5 GW.
Energía eólica, la más barata
Ramón Fiestas reconoció que fue en la subasta del año pasado “donde se tocó el suelo del precio a nivel mundial”, lo que convirtió a México en el lugar del mundo donde más barato se ha podido producir y vender la electricidad al Estado, esto con las ventajas implícitas para el gobierno mexicano y sus consumidores.
Por eso, dijo tener confianza en que cualquier gobierno en activo será sensible con la industria eólica porque beneficia a habitantes y consumidores de la electricidad en México, y espera que en breve el gobierno reactive los procesos de la forma que lo considere más conveniente y apropiado para no frenar la marcha industrial, tecnológica y económica que brinda la energía eólica.
Insistió en que México debe seguir integrando energía eólica para alcanzar a cubrir la cuota propuesta para 2025 de generar energía limpia en un 50%, lo cual significaría pasar de los 5 mil megavatios que hasta ahora se tienen instalados a 20 mil megavatios, aunque, para que eso suceda, se necesitan instalar entre mil y 2 mil megavatios anualmente.
Para leer la entrevista completa, consulte la edición de abril de Global Energy