La financiación pública para el clima de los países desarrollados hacia los países en desarrollo se situó en 56 700 millones de dólares estadounidenses en 2017, un aumento del 17 % desde los 48 500 millones en 2016, según los nuevos datos recopilados por la OCDE.
Una nueva serie de datos para el período 2013-2017 revela que la financiación pública para el clima ha aumentado un 44 %, desde los 39 500 millones de dólares estadounidenses en 2013. El aumento interanual ha sido continuo, aparte de una pequeña caída en 2015.
Los datos incluyen ayuda pública bilateral relacionada con el clima de los países desarrollados, financiación multilateral para el clima atribuible a los países desarrollados y créditos a la exportación con apoyo oficial relacionados con el clima de países desarrollados. Se prevé que las estimaciones actualizadas de los flujos de financiación privada movilizada a favor del clima se faciliten en 2019. Para completar la información, se incluyen en el informe las anteriores estimaciones de la financiación privada movilizada a favor del clima para el período 2013-2014.
La cifra de 2017 es consistente con una trayectoria lineal hacia la proyección que realizó la OCDE en 2016 de una financiación pública para el clima en 2020 de 66 800 millones de dólares estadounidenses, excluidos los créditos a la exportación.
La financiación pública para el clima de los países desarrollados hacia los países en desarrollo está aumentando
Esta serie temporal muestra que la financiación pública bilateral para el clima aumentó un 20 % entre 2013 y 2017, hasta alcanzar los 27 000 millones de dólares estadounidenses. La financiación multilateral para el clima atribuible a los países desarrollados creció un 79 %, hasta los 27 500 millones de dólares estadounidenses, y los créditos a la exportación relacionados con el clima aumentaron un 31 %, hasta los 2 100 millones.
Dentro de esta financiación, la destinada a la adaptación al cambio climático creció un 65 %, desde los 7 800 millones de dólares estadounidenses en 2013 hasta los 12 900 millones en 2017. La financiación para la mitigación del cambio climático aumentó un 38 %, desde los 28 200 millones de dólares estadounidenses hasta los 38 900 millones, y la financiación para acciones transversales creció un 37 %, desde los 3 500 millones de dólares estadounidenses hasta los 4 800 millones.
La combinación relativa de subvenciones y préstamos (con y sin condiciones favorables) se mantuvo relativamente estable durante todo el período de cinco años. Las subvenciones representaron más de un tercio de la financiación bilateral para el clima y menos del 10 % de la multilateral, mientras que los préstamos supusieron en torno al 60 % de la financiación bilateral y cerca del 90 % de la multilateral. La financiación mediante subvenciones aumentó un 25 %, desde los 10 300 millones en 2013 hasta los 12 800 millones de dólares estadounidenses en 2017, mientras que el volumen de préstamos se duplicó hasta los 40 300 millones de dólares estadounidenses en 2017 desde los 20 000 millones en 2013. La mayor parte de los préstamos bilaterales fueron con condiciones especiales; la mayoría de los préstamos multilaterales fueron sin condiciones especiales.
Durante el período, todas las regiones recibieron cantidades mayores de financiación pública para el clima. A lo largo del período de referencia, Asia, seguida de África y América Latina, recibió los mayores porcentajes tanto de financiación bilateral para el clima como multilateral, con más del 80 % en cualquiera de los años.