El primer ministro de Ontario, Doug Ford, advirtió que su provincia podría suspender el suministro de electricidad a Estados Unidos si el presidente electo Donald Trump cumple con su promesa de imponer aranceles del 25% a las importaciones provenientes de Canadá. Ontario, la provincia canadiense que más energía exporta, envió en 2023 suficiente electricidad para abastecer a 1,5 millones de hogares estadounidenses.
Ford señaló que, de ser necesario, cortarán el suministro de energía hacia estados como Michigan, Nueva York y Wisconsin, con el objetivo de proteger a los canadienses. Esta medida podría intensificar las tensiones comerciales entre ambos países, especialmente si Trump sigue adelante con sus planes de aplicar tarifas arancelarias como respuesta a lo que considera una insuficiente gestión de los flujos migratorios y el tráfico de drogas.
La amenaza llega en un contexto donde las relaciones comerciales entre Canadá y Estados Unidos son fundamentales para ambas economías. El comercio entre estos países incluye, además de electricidad, importantes exportaciones de petróleo, gas, acero y minerales.
El gobierno canadiense ha prometido reforzar la seguridad fronteriza y tratar de mitigar los efectos de las políticas propuestas por Trump, aunque también advirtió que podría haber represalias si se imponen los aranceles, lo que afectaría gravemente a la economía canadiense. La renegociación del tratado T-MEC entre los tres países, programada para 2026, también podría verse afectada por esta nueva disputa comercial.