Una subasta realizada este viernes en Brasil permitió la contratación de 65 nuevos proyectos hidroeléctricos, con una inversión estimada de 1,011 millones de dólares. El proceso, coordinado por la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel) y la Cámara de Comercialización de Energía Eléctrica (CCEE), busca ampliar la capacidad instalada del país con 815.6 megavatios (MW) adicionales.
Los proyectos adjudicados incluyen pequeñas y medianas centrales hidroeléctricas de hasta 50 MW, que deberán comenzar a suministrar energía a partir del 1 de enero de 2030. Los contratos tendrán una vigencia de veinte años, lo que garantiza estabilidad en la entrega de electricidad a largo plazo.
El principal comprador en esta subasta fue Amazonas Energia, que adquirió el 38.6% de la demanda contratada. También participaron empresas como Neoenergia Coelba, Enel Ceará, Light, Enel São Paulo, Neoenergia Pernambuco, Neoenergia Cosern, Energisa Paraíba y Energisa Tocantins, consolidando el interés del sector privado en ampliar la infraestructura energética del país.
Según los organizadores, el resultado refleja una apuesta por fuentes renovables y una estrategia de largo plazo para diversificar el suministro eléctrico. “La contratación de nuevos emprendimientos hidráulicos fortalece la matriz energética brasileña y promueve inversiones sostenibles”, señalaron representantes de Aneel durante el anuncio.






