Goldman Sachs recibirá más de 400 millones de dólares tras una disputa de casi cuatro años con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sobre una transacción de gas natural. La controversia surgió debido a los efectos de una tormenta invernal en Texas en febrero de 2021, que alteró los precios del gas, lo que generó una obligación económica inesperada para la CFE.
La operación, que fue acordada originalmente en 2021 con la filial estadounidense de la CFE, se complicó cuando una ola de frío afectó los mercados de gas natural, haciendo que los precios diarios se dispararan. Esto dejó a la CFE con un adeudo mucho mayor al previsto, que originalmente se estimaba en unos 300 millones de dólares. Después de años de negociaciones y arbitraje, se alcanzó un acuerdo que permitió a ambas partes resolver el conflicto ante la Corte de Arbitraje Internacional de Londres.
Aunque la CFE había argumentado que el contrato no debía cumplirse debido a las circunstancias imprevisibles, finalmente se redujo el alcance económico de la disputa, estableciendo un pago a favor de Goldman Sachs.