Rick Perry, secretario de Energía de Estados Unidos, elogió que México busque poner fin a las importaciones masivas de gasolina y diésel, casi todas provenientes de su país, como una medida que impulsará la prosperidad prevista por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
El funcionario norteamericano destacó los planes de AMLO en el sentido de disminuir la dependencia energética del exterior, e hizo a un lado las preocupaciones de que las refinerías estadounidenses puedan perder su mayor mercado en el extranjero.
“Es una buena meta para México. Me quito el sombrero ante el presidente electo por tener eso como meta. Espero que tengan éxito con esa transición», manifestó en declaraciones para los medios de comunicación.
Añadió que desarrollar los recursos energéticos propios y la prosperidad que conllevan es un buen objetivo para el nuevo gobierno, por lo que Estados Unidos estará dispuesto a ayudar a México para alcanzarlo.
Cabe recordar que Andrés Manuel López Obrador ha prometido poner fin a las importaciones de gasolina en un plazo de tres años y aumentar la producción nacional de combustibles de valor agregado, comprometiéndose a modernizar las seis refinerías de Pemex y construir una nueva en Tabasco.