La generación de electricidad a partir de fuentes renovables superó por primera vez al carbón a nivel mundial durante el primer semestre de 2025, según datos del centro de análisis energético Ember. Este cambio marca un punto de inflexión en la transición energética global.

El crecimiento de la demanda eléctrica fue absorbido completamente por la expansión de la energía solar y eólica, lo que permitió una leve caída en el uso de carbón y gas. “Este es el comienzo de un cambio donde la energía limpia mantiene el ritmo del crecimiento de la demanda”, afirmó Małgorzata Wiatros-Motyka, analista senior de Ember.

Sin embargo, el panorama global es desigual. Países en desarrollo como China e India lideraron la adopción de tecnologías limpias, mientras que economías avanzadas como Estados Unidos y la Unión Europea incrementaron su dependencia de combustibles fósiles. En EE. UU., la demanda eléctrica creció más rápido que la capacidad renovable. En Europa, el bajo rendimiento de la energía eólica e hidroeléctrica impulsó el uso de carbón.

China continúa ampliando su infraestructura de carbón, pero también encabeza el crecimiento renovable. Añadió más capacidad solar y eólica que el resto del mundo combinado. En África, el auge solar se refleja en un aumento del 60 % en importaciones de paneles, con países como Nigeria, Zambia y Argelia mostrando tasas de crecimiento aceleradas.

El informe también advierte sobre efectos no previstos. En Afganistán, el uso masivo de bombas solares está reduciendo el nivel freático, lo que podría comprometer el acceso al agua en los próximos años. Este tipo de impactos subraya la necesidad de una planificación integrada en la expansión de energías limpias.

Mientras tanto, China consolida su dominio en el sector tecnológico energético. En agosto de 2025, sus exportaciones de tecnologías limpias alcanzaron los 20 mil millones de dólares, impulsadas por vehículos eléctricos y baterías, que ya superan en valor a sus exportaciones solares.