Durante su intervención en la cumbre organizada por la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), el presidente de grupo Iberdrola, Ignacio Galán, declaró que la aportación potencial del sector eléctrico es clave en la recuperación económica que hay que encarar tras el impacto de la pandemia del coronavirus, ya que las inversiones en este sector hacen que, por cada empleo interno generado, haya otros 12 en sectores como la construcción, la fabricación de bienes de equipo, servicios de ingeniería, instalación o máquinas de herramienta.
Para Galán, gracias al Plan Nacional de Energía y Clima, que se encuentra en tramitación en el Parlamento español, ya se dispone de una hoja de ruta para que la inversión que se produzca en el sector durante la próxima década genere 300 mil empleos en España, por lo que pidió acelerar su implementación a 2025, para que tenga un efecto inmediato en el crecimiento económico y el empleo, aumentando la competitividad, disminuyendo la dependencia energética del exterior, lo que permitiría reducir emisiones de gases nocivos, sin poner presión en las cuentas públicas.
“Un incremento significativo de la inversión en redes de distribución podría generar hasta 40 mil puestos de trabajo en España”, pero para ello hay que adoptar medidas como la eliminación del límite máximo de inversión del 0.13 % del PIB que tenemos en nuestra legislación”, precisó Galán.
En el ámbito de las energías renovables, acelerar la instalación de nueva capacidad hasta 2025 supondría inversiones de 32 mil millones de euros y generaría con rapidez 90 mil puestos de trabajo en todo el territorio, especialmente en el ámbito rural, dijo el presidente de Iberdrola quien a su vez, abogó por aumentar la capacidad de almacenamiento de energía, que aporta flexibilidad al sistema: “Una inversión de 5.000 millones de euros en bombeo hidroeléctrico y baterías hasta 2025 favorecería la creación de 14.000 empleos”, detalló.
Por otra parte, Ignacio Galán expuso los beneficios derivados de impulsar la electrificación en otros usos energéticos, lo que dará lugar a inversiones muy relevantes en sectores como el de la climatización y transporte.
Para concluir, el directivo instó a no perder el tren del desarrollo de nuevas tecnologías como la del hidrógeno verde, debido a que la descarbonización del 25 % del hidrógeno industrial implicaría inversiones de más de 4.000 millones de euros y la creación de 11.000 empleos en una nueva industria española.