La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó la detención en Estados Unidos de Carlos Treviño Medina, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), quien será deportado a México para enfrentar cargos por corrupción relacionados con el caso Odebrecht. “Finalmente se le encuentra y va a ser juzgado en México”, declaró durante su conferencia matutina, en referencia a la solicitud de extradición emitida hace cinco años.
Treviño encabezó Pemex entre 2017 y 2018, en el cierre del sexenio de Enrique Peña Nieto, y previamente fue director de administración. Está acusado de haber recibido más de 4 millones de pesos en sobornos por parte de Braskem, filial de Odebrecht, para favorecer el proyecto petroquímico Etileno XXI. La denuncia está vinculada al testimonio de Emilio Lozoya, también exdirector de la petrolera estatal.
El exfuncionario contaba con una orden de aprehensión, una alerta migratoria emitida por el Instituto Nacional de Migración (INM) y una ficha roja de Interpol por los delitos de cohecho, asociación delictuosa y lavado de dinero. La presidenta destacó que su captura representa un paso importante en el combate a la impunidad en casos de corrupción de alto perfil.
Aunque desde 2021 se sabía que Treviño residía en Texas, su detención no se había concretado. La deportación permitirá que enfrente el proceso judicial en México, en un contexto donde se busca esclarecer los vínculos entre exfuncionarios y la red de sobornos de Odebrecht.
El caso Odebrecht ha tenido repercusiones en varios países de América Latina. En México, la detención de Treviño podría reactivar investigaciones sobre decisiones tomadas durante su gestión en Pemex. Las autoridades no han precisado la fecha exacta de su deportación, pero se espera que enfrente el proceso judicial en territorio nacional en los próximos días.






