Iberdrola anunció el reforzamiento de su plan de apoyo a clientes, activado hace semanas para aliviar la crisis del COVID-19, con un servicio de urgencias eléctricas gratuito para sus dos millones de clientes mayores de 65 años en España.
La compañía sigue garantizando energía a cerca de 100 millones de personas en el mundo, en países como España, Reino Unido, Estados Unidos, Brasil, México, Alemania, Portugal, Italia y Francia.
Con esta iniciativa, en concreto, el colectivo más vulnerable en esta coyuntura tendrá cubierto, durante todo el periodo que dure el estado de alarma, un servicio de urgencias que solucionará cualquier problema relacionado con la falta de suministro eléctrico en el hogar, cubriendo tanto los costos de desplazamiento del técnico, como la mano de obra.
Iberdrola cuenta con una amplia red de instaladores en todas las comunidades autónomas, que seguirán un estricto protocolo de seguridad y salud para la prestación de este servicio. Esta medida incluye, adicionalmente, la puesta en marcha de un canal telefónico de uso exclusivo para este colectivo de clientes.
Este servicio gratuito de urgencias eléctricas se suma al plan de ayuda lanzado por la firma hace semanas para facilitar el pago de las facturas de luz, gas y otros servicios energéticos a sus más de 10 millones de clientes en España, tanto hogares, como autónomos y Pymes.
La compañía permite de esta forma flexibilizar los pagos a todos los clientes con dificultades de pago que lo soliciten, tanto en mercado libre como en el regulado, mediante un fraccionamiento de facturas de hasta 12 meses y sin costo.
Iberdrola ha aplicado esta medida en todos los países donde opera comercialmente y ha completado sus acciones de ayuda durante la crisis pandémica con un Plan de Asesoramiento para que sus clientes puedan ajustar su contrato y pagar menos en la factura de luz.