Repsol ha comenzado a producir electricidad en su primera planta fotovoltaica en Estados Unidos, llamada Jicarilla 2, en el estado de Nuevo México. La instalación, ubicada en tierras de Jicarilla Apache Nation en el condado de Río Arriba, tiene una capacidad instalada total de 62.5 megavatios (MW).

Jicarilla 2 podrá suministrar electricidad a partir de fuentes renovables a 1.6.000 hogares, evitando la emisión de casi 50.000 toneladas de CO 2 cada año. La compañía está desarrollando en la misma ubicación otro proyecto solar, Jicarilla 1, con 62,5 MW de potencia instalada y 20 MW de almacenamiento en batería.

Además, Repsol ha anunciado recientemente su intención de invertir en un proyecto de 600 MW en el Estado de Texas, que se convertirá en el mayor proyecto fotovoltaico del grupo hasta la fecha y se espera que esté operativo a finales de 2023.

La generación de energía renovable es actualmente uno de los pilares de la estrategia de descarbonización de Repsol. La compañía ha elevado recientemente sus objetivos de capacidad instalada en todo el mundo a 6 GW para 2025 y 20 GW para 2030, con 2,1 GW que se espera que estén operativos en los Estados Unidos para 2025 y alcancen los 7,8 GW en el país para 2030.

La electricidad renovable generada por Jicarilla 2 será vendida por PNM. Esta compañía es el mayor proveedor de electricidad en el Estado de Nuevo México y un importante proveedor de la ciudad de Albuquerque, que se ubica como uno de los 15 municipios líderes en el uso de energía renovable en los EE. UU. El proyecto Jicarilla 2 permitirá a Albuquerque alcanzar un 88% de energía renovable en sus actividades del gobierno local, solo un 12% por debajo de su objetivo de ser energía 100% renovable.

Además de la ciudad de Albuquerque, la instalación proporcionará energía renovable a municipios, entidades gubernamentales, tribales y educativas, así como a grandes clientes comerciales como Western New Mexico University, Walmart, santa fe county, bernalillo county, la ciudad de Deming, grant county y Silver City.

«En Repsol estamos encantados de que este proyecto sea nuestra primera instalación renovable propiedad y operada en Estados Unidos. A través de esta importante expansión de nuestra actividad global, reafirmamos nuestro compromiso de ser una empresa de cero emisiones netas para 2050», dijo la Gerente General de Clientes y Generación Baja en Carbono de la compañía, Maria Victoria Zingoni.

«Este proyecto es monumental para Albuquerque: ahora estamos entre los líderes de la nación en la adopción de energía renovable por parte del gobierno local y mostrando cómo la transición a las energías renovables está al alcance», declaró el alcalde de Albuquerque, Tim Keller.

«Nuevo México tiene un notable potencial de energía solar y juntos estamos haciendo avanzar al estado hacia los recursos de energía renovable. PNM está comprometida con la electricidad 100 por ciento libre de carbono y estoy orgulloso de estar al lado de los líderes locales que tienen una visión común para el futuro», dijo el presidente y CEO de PNM, Pat Vincent-Collawn.

Adquisición de Hecate Energy

Con esta primera planta solar en EEUU, Repsol materializa el acuerdo que firmó en mayo del año pasado para adquirir el 40% de Hecate Energy, empresa estadounidense especializada en el desarrollo de proyectos fotovoltaicos y baterías para almacenamiento de energía. Gracias a esta operación, Repsol sigue avanzando en sus objetivos de diversificar geográficamente su negocio de renovables, complementar sus capacidades, mejorar su cartera y crear una plataforma sólida con gran potencial de crecimiento.

Hecate Energy, con sede en Chicago, tiene una amplia cartera de proyectos que suman más de 40 gigavatios (GW). De estos, 16,8 GW corresponden a proyectos fotovoltaicos y de almacenamiento asociados a estos activos, que se encuentran en una fase avanzada de desarrollo, y 4,3 GW pertenecen a una plataforma de baterías para el almacenamiento de energía, denominada Hecate Grid.

El acuerdo permitirá a Repsol convertirse en un actor relevante en el sector fotovoltaico y de baterías de Estados Unidos a través de su participación en el negocio de desarrollo de proyectos renovables de Hecate Energy. Por otro lado, la compañía tendrá la posibilidad de comprar la totalidad del accionariado de Hecate Energy tres años después del cierre de esta transacción.