El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció nuevas sanciones contra las petroleras rusas Rosneft y Lukoil, en respuesta a lo que calificó como una “falta de compromiso serio” por parte del gobierno ruso para avanzar en un proceso de paz que ponga fin a la guerra en Ucrania.
Las medidas, anunciadas por el secretario del Tesoro Scott Bessent, se extienden a las filiales y empresas vinculadas en las que Rosneft y Lukoil tengan más del 50 % de participación, directa o indirecta. “El Tesoro está sancionando a las dos mayores empresas petroleras de Rusia que financian la maquinaria bélica del Kremlin”, declaró Bessent desde la Casa Blanca.
La nueva penalización incluye el bloqueo de bienes e intereses en territorio estadounidense, la prohibición de transacciones por parte de personas o empresas de EU, y la exclusión del sistema financiero estadounidense. Ambas compañías ya estaban sujetas a restricciones previas, pero esta acción amplía su alcance operativo.
Rosneft, empresa estatal, produce cerca del 6% del crudo mundial y casi la mitad del petróleo ruso. Junto con Lukoil, exportan aproximadamente 3.1 millones de barriles diarios, lo que las convierte en actores clave del sector energético global.
El Tesoro subrayó que estas sanciones buscan mermar la capacidad del Kremlin y reiteró su disposición a tomar nuevas medidas si fuera necesario. “Animamos a nuestros aliados a que se unan a nosotros y se adhieran a estas sanciones”, añadió Bessent.
Desde el inicio del conflicto en febrero de 2022, Washington ha sancionado a más de 6,000 personas y entidades vinculadas a la maquinaria bélica rusa. Las acciones se han intensificado en función de la evolución del conflicto y de los ataques registrados en territorio ucraniano.
La Casa Blanca indicó que no existen “planes inmediatos” para una nueva cumbre entre el presidente estadounidense y el líder ruso, pese a declaraciones recientes que apuntaban a un posible encuentro en el corto plazo.






